Fuenteodra, en Burgos, que hizo historia hace cinco años al rescatar su templo gótico de la ruina, recurre ahora al micro mecenazgo para salvar el campanario
Madrid, 19 de junio de 2025- Fue durante los días tristes de la pandemia, allá por 2020, cuando se terminaba de gestar la idea: salvar de la ruina definitiva la magnífica iglesia gótica del siglo XV de San Lorenzo Mártir, en Fuenteodra (Burgos). El reto parecía inalcanzable para un pueblo con tan solo 7 habitantes censados pero, tras ponerse en contacto con la asociación Hispania Nostra para iniciar una campaña de micro mecenazgo, llegó el milagro: su objetivo era alcanzar los 30.000€ en donativos, pero sobrepasaron los 51.000€.
Detrás de este éxito había una asociación cultural, Manapites, que habían formado los 7 vecinos de Fuenteodra liderados por uno de ellos, Javier Maisterra, un ingeniero de montes que se negaba a que el templo, cerrado desde hacía 15 años por su penoso estado, terminara por venirse abajo. Los medios de comunicación hicieron el resto: todas las cadenas nacionales de televisión, emisoras de radio, prensa y numerosos medios extranjeros se presentaron en el diminuto y recóndito pueblo burgalés para conocer de primera mano el sueño de los 7 vecinos. Los donativos comenzaron a afluir y, a los pocos meses, se llevaban a acabo las primeras obras de consolidación del templo, lo que suponía su salvación.
Ahora, la asociación cultural Manapites –«un entusiasta y variado grupo de personas concienciadas con la protección y difusión del patrimonio»–, ha emprendido otro proyecto: la última fase de consolidación de la iglesia, que pasa por restaurar íntegramente su torre. Una profunda grieta recorre de arriba a abajo la estructura, y los vecinos se proponen ahora «la ejecución del atirantado de muros, la reapertura de la portada, actuaciones consolidación en fábrica exterior e interior, y consolidación de bóvedas y arco en coro y campanario».
Por eso han acudido nuevamente a la asociación Hispania Nostra para lanzar una campaña de micro mecenazgo que les permita conseguir los 46.331€ que necesitan antes del 23 de julio. A los pocos días de comenzarla han recibido una sorprendente noticia: un donante ha decidido aportar 100.000€ para el proyecto. Pese a ello, la campaña continúa: aún queda por arreglar todo el interior del templo.
«Desde que comenzamos la andadura en el año 2019, hemos logrado reunir en torno al proyecto una amplia base social de seguimiento y apoyo, que incluso trasciende fronteras, lo cual nos da mucho ánimo para continuar, a la vez que una enorme responsabilidad», reconocen desde Manapites. «Hemos de sentirnos orgullosos de haber sido capaces de llegar a tiempo y salvar del colapso a esta joya de más de 500 años de antigüedad que a punto estuvo de desaparecer ante nuestros ojos como consecuencia directa del abandono y el olvido de esa triste España vaciada que lo devora todo», concluyen.




