El listado ya incluye 121 elementos patrimoniales en peligro en la región
Madrid, 3 de marzo de 2022-. El ingente patrimonio cultural de Castilla-La Mancha incorpora dos valiosos elementos más a la Lista Roja del Patrimonio de Hispania Nostra. Se trata de dos construcciones muy distintas y separadas en el tiempo, pero les une el estado de abandono total en que se encuentran. Son la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Trijueque (Guadalajara) y el castillo de Gálvez, en Toledo. Con ellos, son ya 121 elementos patrimoniales en peligro incluidos en el citado listado.
Su pésimo estado de conservación les ha llevado a ser incluidas en la Lista Roja del Patrimonio que elabora la asociación Hispania Nostra (www.listarojapatrimonio.org) y que recoge más de mil monumentos españoles que se encuentran sometidos a riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores.
La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Trijueque fue fundada por fray Miguel López de Serna, obispo de Gran Canaria, y se encuentra actualmente en ruinas. Antiguamente fue el palacio de los Mendoza, en el cual estuvo custodiada en 1470 Juana “La Beltraneja”, hija de Enrique IV de Castilla. Durante la Guerra Civil sufrió muchos daños, que fueron reparados entre 1944 y 1961. La iglesia estuvo celebrando misas hasta el año 1964, cuando la parroquia se trasladó de lugar. A partir de ese año, el templo quedó abandonado.
Se trataba de una iglesia de tres naves de diferentes alturas. En su fachada muestra elementos platerescos, como su portada, con hornacina superior con medias columnas dóricas, cartelas y arabescos. La cubierta, por su parte, era de bóvedas nervadas y gallonadas. El sepulcro del obispo de Gran Canaria, fray Miguel López de la Serna, estaba situado en la capilla de San Juan Bautista, que lucía una lauda sepulcral en alabastro, y que hoy se encuentra en el Museo Diocesano de Sigüenza. La iglesia, además, se encuentra adosada a la Casa-Palacio de los Mendoza.
El castillo de Gálvez, también conocido como Los Castillos fue construido en el siglo XII y abandonado en el XV. Se desconoce exactamente cuál fue su uso, debido a que no hay registros de esta localidad anteriores al siglo XVIII. La fortaleza se ubica en un antiguo asentamiento sobre el Cerro de santa Brígida.
El castillo original era de planta cuadrada, formado por cuatro torres de las cuales actualmente solo se conservan tres. Las torres carecen de coronamiento y conservan algunas saeteras. Al carecer hoy día de muralla, y ante la vista de las tres torres aisladas se conoce a las ruinas de esta fortaleza con el nombre de Los Castillos.